miércoles, 5 de junio de 2019

Hitos filosóficos influyentes en el pensamiento moderno Occidental



Hitos filosóficos influyentes en el pensamiento moderno Occidental


Pensamiento moderno

   Ya en el siglo XVIII la efervescencia de la industrialización y la racionalización, la creencia de que todo es posible mediante la tecnología y la ciencia, despertó la conciencia de varios pensadores, tales como Karl Marx con su dura crítica al sistema basado en el capital, de Kant quien reflexiona sobre  la racionalidad.

   El mundo medieval queda atrás, se produce en todo el mundo a su tiempo una emancipación de Dios y del rey, surgiendo las reglas del individuo. "La modernidad es la salida del hombre de su auto culpable minoría de edad" (Kant en Crítica de la razón pura). En dicha época se ubica el conocido "siglo de las luces", donde se sale del oscurantismo medieval, se consolidan las ciudades, los mercados, las industrias y el capitalismo. La razón es considerada todopoderosa (auge del empirismo), la cual permitirá un progreso ilimitado y se fija el utilitarismo. Dicha lógica tuvo un choque que desfondó ese paradigma: Auschwitz fue un límite.
   
   Fenomenología

   "Volver a las cosas mismas" (Volver a los inicios), era el lema del creador de la corriente, Edmund Husserl. Quería construir una filosofía que partiese de datos indudables, la metodología: el epoché (una postura donde no se afirma ni niega nada), donde el conocimiento que resista los reiterados asaltos de la epoché será el residuo fenomenológico.

   De allí parte su discípulo, uno de los pensadores más importantes del pensamiento contemporáneo, Martin Heidegger, quien se centra en el misterio del ser y busca la "Ausencia que se esconde detrás de toda presencia". Es clave el sentido de la existencia que encuentra Heidegger.

   Al ser (persona) que se pregunta por el sentido de su existencia lo denomina dasein, dicha perspectiva teleológica (que busca el fundamento último) se asombra en que pudiendo existir nada existe todo; se da cuenta que en el fondo, el desfonde.

   Ser-ahí ya que al nacer somos arrojados a la vida, somos arrojados a la realidad, somos también proyecto, podemos ser todo lo que podamos imaginar, somos un abanico abierto. Somos existencia, por tanto somos proyecto que transforma las cosas en "útiles". La principal característica del hombre es ser-en-el-mundo, ya que estamos situados en un contexto y el mundo es una herramienta para nuestro proyecto, es un espacio de transformación que lo transformás y también te transforma. Por tanto nos caracteriza ser-con-otros ya que los demás me influyen y también me condicionan, el otro me condiciona y debo hacerlo a un lado de mi camino. Pero nuestra existencia ¿Para qué está? ¿De dónde venimos y hacia dónde vamos? Es el ser-para-la-muerte parte de nuestra naturaleza, hay una máxima posibilidad en nuestra vida que es capaz de anular todas las demás posibilidades. Sin embargo hay quienes tienen una fe natural en la vida y tienen el coraje de vivir, y viven su existencia de manera auténtica (despertando a la conciencia de que en el fondo está el desfonde, expone su finitud a si mismo, es consciente de que nacimos para morir, que la muerte nos constituye y acciona de forma continua en nosotros, en ese sentido dicha conciencia nos ayuda a tomar decisiones y nos lleva a buscar el sentido) o eligen la más sencilla: la in auténtica (una existencia basada en el impersonal "se" y en el "dicen", el seguir a una masa anónima e ignorante como si fuésemos parte de un cardumen, un modo de huir de la angustia que produce saber que en el fondo no hay nada, llenando el vacío con chismes, con ruido, con nada; no queriendo pensar en que moriremos eventualmente, viviendo como si no se fuera a morir).

   La angustia del desfonde y de la conciencia de que nacimos para morir no necesariamente tiene que quitar la paz. Si tomamos conciencia de que la vida es un regalo, sólo si el hombre tiene el coraje de ser consciente, le puede encontrar el sentido del ser y puede vivir en plenitud el tiempo que le queda. A la muerte no se le tiene miedo, se le tiene que temer, la cual es una experiencia más profunda. Es un despertar a que todo lo que creemos absoluto y perfecto (falsos infinitos), están sobrevalorados. La misión es ser feliz, no satisfacer expectativas. La angustia me oprime porque me supera, es inevitable el hecho de la muerte y me lleva a buscar el sentido, es una cachetada de la realidad desvaneciéndose la conciencia en el equívoco.

Existencialismo
   
   La época donde se desarrolla la corriente de pensamiento es de crisis: la crisis de aquel pensamiento romántico que durante todo el siglo XIX y la primera década del XX garantizaba el sentido de la historia en nombre de la razón, lo absoluto, fundamentaba valores estables y aseguraba un progreso absoluto e imparable. Pero el existencialismo, con su auge en las décadas posteriores a las dos Guerras en una Europa desgarrada, considera que el hombre es un ser finito arrojado al mundo donde es continuamente afectado por situaciones problemáticas o absurdas.
   
   En este sentido Jean-Paul Sartre, quien se afirma en un pensamiento ateo, plantea que hay que soltar el pasado y hacerme cargo de mi realidad ya que puedo ser distinto a lo que me hicieron, "El hombre es aquello que se hace con lo que hicieron de él": Respecto a su respuesta al sentido de la existencia afirma que todo es contingente (no necesario), las cosas no tienen sentido, la vida es una aventura absurda, "somos una pasión inútil entre dos nadas". Hoy estamos acá, mañana quien sabe, en este sentido no somos necesarios y lo real es absurdo; a esta experiencia metafísica Sartre la denomina náusea.
   
   Por otro lado, Gabriel Marcel otra cara del existencialismo, sospecha que hay un sentido "La realidad nos viene dotada de una credentidad (algo en que creer)", perfecciona su libertad que lo constituye como ser con un fin trascendente. Fija dos conceptos: creer ≠ verificar (no son tan distintos ya que uno influye al otro, mientras que verificar es un proceso racional la fe va más allá de la ciencia por lo que la misma no la puede captar) y problema metaproblema (más allá) (el problema se verifica mediante el método científico y trata problemáticas concretas, en cambio el metaproblema trata el sentido de la vida desenvolviéndose en el misterio "El misterio se absorbe, somos mendicantes de él"). Hay una frase del autor que lo sintetiza: "Más allá de lo que podemos comprender (problema), está lo que nos constituye (metaproblema relacionado con el misterio".

   La escuela de Frankfurt, Theodor Adorno y Max Horkheimer

   Hace investigación social de la sociedad post industrial en Guerra y post Guerra. Se pensó como un nuevo marxismo, plantea que el marxismo necesitaba actualizarse ya que las condiciones habían cambiado. 
   
   Horkheimer plantea que "No hay forma de salirse del sistema, pero por medio de la filosofía crítica podemos corrernos e irrumpir en esa realidad". Se han sustituido los fines (de los cuales la razón no sabe nada) por medios. Ya no hay una razón objetiva y una racionalidad, el sistema establece la verdad, "El que tiene el poder establece la norma", como dice Focault. Cuando la razón camina en el vacío, los verdaderos héroes de este tiempo son los mártires del Holocausto (los que murieron en el atentado del 9/11 en las Torres Gemelas, los inocentes masacrados en la guerra en Siria, etc.) quienes fueron víctimas de la falta de conciencia y de intereses de los poderosos. Por esto el que tiene el pensamiento filosófico debe denunciar la razón instrumental.

   También Adorno ofrece su juicio sobre el trayecto recorrido por la razón que ha tratado de racionalizar el mundo burocrática y organizadamente, convirtiéndolo en algo manipulable y sometido a la dominación del hombre. De la "razón objetiva" no importa la verdad de sus teorías sino su funcionalidad: fines sobre los que la razón ha perdido todo su derecho. Es decir, la razón es puramente una razón instrumental porque sirve únicamente para individualizar, construir o perfeccionar los instrumentos o medios adecuados al logro de fines establecidos y controlados por el "sistema". Ésto es así ya que se ha dejado de lado la pregunta fundamental en el proceso racional, se busca entender la realidad predominante categorizándola y no la ausencia que se esconde detrás de toda presencia. En este sentido se puede hablar de una industria cultural que impone cultura con fines desconocidos, que necesita personas convencidas del sistema que lo reproduzcan para lograr establecer patrones culturales; ésto se da en nuestra sociedad tecnológica y capitalista. Nada es inocente, la diversión es programada como si la felicidad fuera trabajar para tener recreación y tener recreación para trabajar, no hay más un ocio sólo por ser ocio sino que es un ocio instrumental. Pero aceptamos  inocentemente todos estos fines establecidos por otros.
   
   Son profetas del sistema del siglo XXI y plantean que la filosofía debe denunciar, debe formar criterios aunque sean subversivos y cambiar la perspectiva, debe ser un despertar.